En este momentos todas las marcas de repelentes tienen stocks de mercadería en los supermercados y negocios.
Por eso es fundamental el uso de repelentes contra los mosquitos porque otra vez se espera que el dengue acecha y la mejor solución es prevenir y evitar las picaduras.
En este momento se pueden conseguir repelentes contra los mosquitos en supermercados, farmacias, mercados de cercanía y en plataformas digitales.
Algunos supermercados están promocionando la marca tradicional de repelentes pero en los negocios solo se consigue el de color naranja, cuando el recomendable contra el dengue es el verde, que hasta ahora solo puede comprar a través de plataformas digitales.
El repelente naranja de la marca tradicional se consigue en supermercados entre los 4 mil y los 4.500 pesos aproximadamente. El verde no está en góndolas.
En tanto, en plataformas digitales se puede conseguir el verde, de larga duración pero el valor es mucho más alto: el más barato ronda los 27 mil pesos.
Las segundas marcas, entre ellas las de supermercados, ofrecen los repelentes contra los mosquitos a un valor algo por debajo del tradicional pero sin la seguridad de que realmente funcionen.
Cómo planea el gobierno combatir el dengue
El gobierno del presidente Javier Milei definió una serie de medidas para implementar en todo el país, con el objetivo de combatir el dengue antes del verano, cuando comenzarán a subir los casos.
Se trata de una combinación de medidas de prevención, control territorial del mosquito y vacunación focalizada para población más expuesta.
Esta semana el ministro de Salud, Mario Russo, encabezó un encuentro con autoridades sanitarias en el que se presentó el Plan Estratégico de Prevención y Control del dengue 2024-2025.
“Para abordar eficazmente el creciente, diverso y complejo problema de las enfermedades arbovirales, es indispensable aumentar la capacidad del sistema sanitario y asegurar elcompromiso y la participación de otros actores del Estado en todos sus niveles, como los sectores de educación y ambiente, así como de los medios de comunicación y, fundamentalmente, de la propia comunidad”, afirmó el Gobierno en su plan integral.
Ese programa contempla “aspectos diversos e importantes, como la vigilancia epidemiológica y las medidas de salud pública; la prevención y el control vectorial; la capacidad de los servicios de salud para ofrecer una atención oportuna y de calidad; y la comunicación y participación comunitaria, integrado en una planificación y gestión estratégica, es esencial paracontribuir a este objetivo”.
Uno de los puntos clave es la vacunación focalizada, que se definió para las zonas endémicas en base a criterios de riesgo: epidemiológicos, geográficos, socioeconómicos y de acceso efectivo a servicios de salud.
El objetivo es iniciar la vacunación en los departamentos con mayor incidencia de casos.
Para lograr ese objetivo, la Nación realizó la adquisición de dosis para la vacunación focalizada en complemento del stock con los que cuentan las provincias que ya adquirieron para cumplir con lo proyectado en esta etapa.
“La vacuna la compra Nación para la población objetivo”, señaló el ministro Russo en declaraciones radiales.
Y aclaró: “Para nosotros, la población inicial para empezar a vacunar es entre 15 y 19 años, en sectores muy puntualizados, fundamentalmente en las provincias del NOA y el NEA, de acuerdo a la incidencia de la enfermedad que tuvieron este año y al acceso a la salud que tengan”.
El secretario de Calidad en Salud, Leonardo Busso, aseguró que el plan integral es “el producto de un trabajo consensuado que se viene realizando desde mayo con los ministros de las provincias y las diferentes áreas del Ministerio de Salud de la Nación, para que cada una de jurisdicciones pueda adaptarlo de acuerdo con sus condiciones y necesidades”.
Además, la estrategia también pone el eje en sostener las medidas de prevención y control territorial del vector durante todo el año, fortaleciendo las acciones contra el mosquito.
Se conformó también una mesa de trabajo con los ministros provinciales tomando como ejes centrales el control local, la consulta temprana y el seguimiento domiciliario de casos.