El Presidente lejos de bajar el tono del conflicto abierto con las universidades, sostiene que las universidades no quieren auditarse, que los pobres no asisten a la universidad. Datos que son rapidamente rebatibles si se toman los datos oficiales del último censo.
El presidente Javier Milei redobla la tensión al conflicto al reafirmar que “solo asisten a las facultades los hijos de las familias ricas”, lo cual es un dato que marca la ignorancia sobre la situación o que bien marca animosidad de dar cifras falsas para sostener el desfinanciamiento que el gobierno de Javier Milei esta realizando sobre la educación en general y la universidad en particular.
En la misma línea, amplió: “No está en discusión la universidad pública ni el no arancelamiento, porque gratuita no es. Alguien la está pagando, la pagan mayormente los que no van. El que va es un beneficiario neto, el que no va es un pagador neto. Gratis no es”, apuntó intentando nuevamente generar una división entre los que deciden y pueden asistir a una universidad para una formación profesional futura y los que no.
Asimismo, reveló que lo que se debate son las auditorias a las universidades para analizar el uso de los fondos. “¿Todos estos que defienden y hacen este revuelo acaso están a favor de que se utilicen las universidades políticamente para robar en beneficio de determinados delincuentes de la política? ¿Están a favor del robo?”, se preguntó, ocultando que las auditorias no se llevan adelante por la ineficacia de su gestión que no nombre a los responsables de llevar adelante las auditorias. Si las universidades no estan siendo auditadas, es porque el gobierno no esta llevando adelante esa tarea.
“Lo único que estoy diciendo es que como esto está siendo pagado por todos, corresponde que esos fondos sean auditados, porque los impuestos no se pagan voluntariamente sino a punta de pistola”, remarcó.
“No quieren ser auditados los que están sucios. Todo este revuelo es tomar una causa noble y ocultar los curros de los delincuentes”, inisitió.
En otro pasaje de la entrevista, el Presidente dejó abierta la posibilidad de discutir el Presupuesto 2025, incrementado las partidas para las universidades respetando la premisa del déficit cero. “Acá está el Presupuesto, vean cómo lo vamos a reasignar. Yo pago los intereses de la deuda, con el resto hagan lo que quieran, pero no voy a subir los impuestos ni tomar deuda nueva”, planteó aunque al área de seguridad que maneja Patricia Bullrich y que con el protocolo antipiquete que reprimió a jubilados y estudiantes, le otorgó el 91 por ciento de aumento para el 2025.
“Los docentes no están bien pagos, no de ahora, es algo histórico. Los tipos que no lo arreglaron me vienen a reclamar a mi por lo que pasa hace 40 años. Estoy dispuesto a arreglarlo, lo que estoy diciendo es que me digan cómo lo hacemos”, expresó sin tomar responsabilidad que fue elegido presidente para ser él que gestione a favor de la población.
Sus palabras llegan en el marco de las medidas de fuerza que se potenciaron en las últimas horas en distintas facultades. Algunas altas casas de estudio están tomadas, incluso hubo enfrentamientos entre libertarios y los estudiantes que protestaban, y en otras se dan procesos asamblearios para definir acciones.
El Presupuesto 2025, la caída en la imagen y la salida de la crisis
Consultado por la posibilidad de que el Congreso rechace el Presupuesto 2025, Milei reveló que no le preocupa la negativa, y aseguró que gobernará con la prórroga del Presupuesto 2023.
Tampoco se mostró inquieto ante la idea de la oposición de presentar una serie de proyectos para terminar con la sanción tácita de los decretos de necesidad y urgencia. “Juego con las reglas del juego que plantea el sistema. He usado todo el aparato institucional que me permite jugar. Respeto el reglamento”, insistió.
El mandatario contó que analiza las encuestas, aunque planteó además que es “natural” perder respaldo, y precisó que no le importa los números que marcan descensos en los apoyos. “La imagen está para eso. Vine a ser el mejor gobierno de la historia y tomo decisiones en función de eso. No me importa lo que pase con la imagen”, subrayó.
Por otra parte, aseguró que la Argentina está “saliendo del infierno de una manera exitosa”, a la vez que destacó la baja de la inflación y pidió “comprender que el populismo no es gratis”.
“Entramos en un sendero que más temprano que tarde vamos a duplicar el PBI. Si esto sale bien, significa que todo el curro de los delincuentes de las políticas perdieron, van a tener que ir a trabajar correctamente”, manifestó.
El enojo contra Pichetto
Tras las fuertes críticas del diputado Miguel Ángel Pichetto, quien cuestionó el plan libertario y se preguntó si el ajuste es “al estilo Martínez de Hoz”, el jefe de Estado aseguró que el legislador es “aliado del partido del Estado” y lo acusó de “ignorante en términos de economía”, a pesar que él siendo presidente y economista dejó demostrado en las redes sociales que no sabe hacer una división.
“Lo que sucede es que Pichetto no es economista, no entiende, habla de algo que no sabe, es bastante irresponsable”, concluyó.