Paulo García, secretario de organización de prensa del gremio APINTA a nivel nacional, detalló en diálogo con Infotep la delicada situación que atraviesa el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en medio de una puja con el gobierno nacional que apunta a profundizar el ajuste en el sector que busca, por medio de retiros voluntarios, “avanzar en el recorte de 1500 puestos de trabajo en el INTA”.
Esta semana se conoció la designación al ingeniero agrónomo Nicolás Bronzovich, como nuevo presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), tras la decisión del Juan Cruz Molina Hafford de dar un paso al costado debido a “diferencias” con el Ministerio de Economía, comandado por Luis Caputo.
“Lo que ocurre en el INTA es lo que ocurre en la mayoría de los organismos públicos, desde que asumió el gobierno de Javier Milei estamos sufriendo un achique en lo presupuestario y en el personal”, analizó el sindicalista.
Y detalló que “el primer paso que llevaron adelante las autoridades es intimar a los (trabajadores) que tenían la edad de jubilación, se llegó a 200 y pico de trabajadores sobre los 6700 que tiene la planta del INTA”.
Por lo que reafirmó que los retiros voluntarios que llevan adelante las autoridades es “un despido encubierto que apunta a destruir la institución.
En este contexto informó que “en la primera etapa se adhirieron 241 personas, a los retiros voluntarios, y se abrió un segundo periodo hasta el 9 de noviembre”, inmediatamente analizó que la baja adhesión a los retiros “no le cayó bien a las autoridades políticas nacionales y por eso le exigieron la renuncia a Molina Hafford”.
Reafirmó: “quieren avanzar en el recorte de 1500 personas en la planta del INTA”